Hace tiempo que
en casa estamos bastante concienciados con lo que comemos y tratamos de comer
lo más sano posible. Somos bastante de dulce y postres y, aunque para los
desayunos ganan por goleada las tostadas con aguacate, aceite, o miel, siempre
trato tener otras alternativas para que los desayunos sean lo más ricos y
variados posibles, pero sin renunciar a comer sano.
Hoy os traigo
estas deliciosas magdalenas integrales, que os recomiendo al cien por cien
porque quedan esponjosas y los ingredientes que llevan no puedan encajar más a
la perfección. Está claro que siempre podréis suprimir o variar las cantidades
para que sea más a vuestro gusto, pero mientras tanto os dejo la receta que he
utilizado yo.
Como os decía, son ideales para
desayunar, o incluso para alguna merienda con un café o un té. ¡Veréis qué
ricas!, por aquí ya han volado. A mi familia les han encantado y mis padres
incluso se han llevado para desayunar en su casa jaja.
INGREDIENTES (PARA 16 MAGDALENAS):
320 gr de harina integral
1 cucharada de levadura
150 gr de panela
½ cucharadita de sal
½ cucharadita de canela
1 taza de leche desnatada
120 gr de aceite de girasol
2 huevos
1 manzana y media cortada a daditos
1 limón rallado
1 poco de jengibre a trocitos o en polvo
½ taza de nueces troceadas
ELABORACIÓN:
1- En un
bol mezclamos la harina, la levadura, la sal, el azúcar y, finalmente, la
manzana y las nueces troceadas (ingredientes sólidos).
2- Por otro lado, mezclamos los ingredientes
líquidos: leche, aceite, huevos, ralladura de limón, canela y jengibre. Una vez
estén mezclados, los juntamos con el bol de los ingredientes sólidos. Volvemos
a mezclar ingredientes y los colocamos en un molde especial para magdalenas.
3- Por
último, las metemos en el horno a 180º con calor arriba y abajo y en una media
hora aproximadamente estarán listas para comer.
No dudéis en etiquetarme y en contarme si las hacéis…
BON APPETIT!